La Fundación Santo Domingo, en alianza con aeioTU, lideran el proyecto «Aprende y Transforma», una iniciativa innovadora que busca fortalecer la atención y las prácticas educativas para la Primera Infancia en los territorios Megabarrio Bicentenario y la isla de Barú, en Cartagena. Este proyecto se desarrolla con un enfoque sostenible y sistémico para mejorar la calidad en la atención y educación de los niños y las niñas, transformando las capacidades de las educadoras y los espacios de aprendizaje en estas comunidades.
La primera fase del proyecto revolucionó la práctica de 32 educadoras y cuidadoras informales, empoderándolas con la metodología de la Experiencia Educativa aeioTU. A través de seis ciclos formativos y acompañamientos personalizados, fortalecieron sus habilidades pedagógicas, creando ambientes de aprendizaje donde el juego y la exploración son los protagonistas. Como resultado, se observaron interacciones respetuosas y significativas con las niñas y los niños, fomentando el desarrollo de habilidades clave para el siglo XXI, como el pensamiento crítico, la creatividad y la colaboración, esenciales para su bienestar y desarrollo.
“Desde la Fundación Santo Domingo impulsamos el fortalecimiento de la atención integral a la primera infancia con un modelo que comprende el aprendizaje, la innovación y la sostenibilidad para garantizar un impacto duradero en el pleno desarrollo de los niños y niñas en su etapa inicial”, expresó Verónica Trujillo, gerente de proyectos Cartagena de la Fundación Santo Domingo.
Además, el proyecto ha transformado dos espacios de aprendizaje en Bicentenario y Barú, creando ambientes armoniosos y enriquecedores, donde los niños y niñas pueden explorar, investigar y aprender de manera significativa. Los espacios fueron adecuados y rediseñados para potenciar las experiencias educativas, promoviendo interacciones de calidad entre los niños, las niñas y sus educadoras.
“Estoy muy contenta con este nuevo espacio, los niños están más cómodos y tenemos nuevos elementos lúdicos para enseñarles con metodologías más atractivas para ellos. Los padres también están muy felices”, manifestó Sandra Gallego, participante de Bicentenario.
*Impacto y resultados
Los primeros resultados muestran que las educadoras lograron un nivel de apropiación del conocimiento superior al 80% en los territorios intervenidos, y un ponderado del 56,01% en la evaluación de avances de su práctica pedagógica.
Las 32 educadoras y cuidadoras certificadas, pertenecientes a 9 organizaciones educativas, ahora cuentan con herramientas avanzadas para mejorar sus prácticas pedagógicas. El proyecto ha impactado de manera indirecta a 400 niños y niñas (206 niños y 194 niñas) de Bicentenario y Santa Ana, en Barú, generando escenarios que promueven el aprendizaje a partir del reconocimiento de sus historias e intereses, impulsando al máximo sus potencialidades y avanzando en procesos fundamentales para su desarrollo integral, como la comunicación, el pensamiento cognitivo, el desarrollo corporal, la expresión afectiva, las habilidades sociales y la creatividad artística.
*Comunidad de aprendizaje y proyección futura
Para garantizar la sostenibilidad del proyecto, se han conformado dos Comunidades de Aprendizaje, una en cada territorio, que permiten la colaboración y co-construcción de conocimientos entre educadoras, líderes educativos y otros actores clave en la atención de la Primera Infancia. Estas redes fortalecen el apoyo mutuo y la mejora continua de la calidad de la educación infantil.
El proyecto «Aprende y Transforma» seguirá trabajando hasta julio de 2025 para continuar consolidando estos avances y ampliando el alcance para llegar a más agentes educativos en Bicentenario y Barú, asegurando que más niños y niñas de Cartagena puedan acceder a una educación de alta calidad que responda a sus necesidades y potencie su desarrollo integral.