#Cartagena | Cartagena vive días asfixiantes. Una intensa ola de calor, acompañada de niveles extremos de humedad, azota sin tregua a la ciudad, afectando la salud de sus habitantes y alterando la rutina diaria de miles de personas.
Desde hace varias semanas, la sensación térmica en algunos sectores ha superado los 45°C, agravada por una humedad relativa que ronda el 90%, convirtiendo cualquier actividad al aire libre en una experiencia agotadora. El calor no da respiro, ni siquiera en las noches, donde los termómetros apenas descienden y el aire se vuelve espeso, casi irrespirable.
Las autoridades han emitido alertas preventivas, recomendando evitar la exposición directa al sol entre las 10:00 a. m. y las 4:00 p. m., mantenerse hidratado constantemente y proteger especialmente a niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
Mientras tanto, los cartageneros intentan sobrellevar el sofoco como pueden: algunos se refugian en centros comerciales y espacios con aire acondicionado, otros recurren a métodos caseros como duchas frecuentes y ventiladores a toda marcha.
Lo cierto es que el calor no da tregua, y todo indica que las altas temperaturas seguirán dominando el panorama climático durante las próximas semanas.
Cartagena, una ciudad acostumbrada al sol, hoy enfrenta un verano extremo que pone a prueba tanto a su gente como a su infraestructura.
