El Papa Francisco, el primer pontífice jesuita y latinoamericano de la historia, falleció en la madrugada de hoy a los 88 años en la Casa Santa Marta, informó el Vaticano a través de sus redes sociales. Su muerte se produjo días después de haber bendecido a los fieles durante la celebración del Domingo de Pascua en la Plaza San Pedro.
Nacido en Argentina, Francisco será recordado por haber impulsado una Iglesia católica más incluyente, cercana a los pobres y comprometida con causas sociales y ambientales. Durante su papado de 12 años, lideró importantes reformas en un Vaticano que había heredado en crisis, tras la sorpresiva renuncia de Benedicto XVI, su predecesor, identificado con el ala más conservadora de la Iglesia.
En Cartagena, su visita oficial del 10 de septiembre de 2017 dejó una huella imborrable. Recorrió los barrios San Francisco y La María, visitó el Santuario de San Pedro Claver en el Centro Histórico y presidió una multitudinaria eucaristía al aire libre en los patios de la Sociedad Portuaria, Contecar.
“El Papa Francisco fue un agente de cambio”, destacó el New York Times en Español, al referirse al legado del pontífice que desafió estructuras tradicionales y promovió una Iglesia en salida.
